2024
2024
En esta serie, “Im-permanencia”, hablo de la la transitoriedad, dejando atrás lo pesado del concreto y trabajando con la imagen fotográfica, la técnica mixta y la encáustica. Nada permanece para siempre, todo es transitorio. Toda existencia, sin excepción, está sujeta al cambio; tiene una condición esencialmente fugaz. En este eterno devenir, cada experiencia y objeto lleva consigo la inevitable sombra del cambio. Contemplar la transitoriedad nos invita a apreciar el valor del presente y a reconocer la belleza efímera que se encuentra en cada instante.